Como siempre que termino una historia me lo preguntáis, ya os comento que este relato no tendrá segunda parte, ni capítulos extra ni nada por el estilo. Termina aquí. Sé que a muchos os gustaría saber cómo fue el viaje de Chucho y Pavel, qué encontraron al llegar a su destino o cómo evolucionó su relación, pero eso lo voy a dejar a la imaginación de cada uno, aunque yo creo que les irá bien puesto que son hombres con recursos.
No obstante, no todo son malas noticias, porque ya os adelanto que estoy trabajando en otro relato (con una estructura similar al de este) en el que me salgo totalmente de mi zona de confort para incursionar en un género nuevo para mí. Todavía no sé lo que tardará en ver la luz, ya que quiero terminarlo antes de empezar a colgarlo en Wattpad, pero ya os iré informando.
Y ahora sí, me despido hasta la próxima. Muchas gracias por leer mi historia. Siempre os lo digo, pero es totalmente cierto: sois vosotros los que hacéis que tenga ganas de seguir escribiendo con vuestros comentarios y vuestro apoyo en las redes sociales (en mi perfil tenéis los enlaces por si queréis seguirme por alguna). Sería genial que me dejaseis un comentario con vuestra opinión general del relato para que yo pueda hacerme una idea de la impresión que os ha causado. Nos leemos pronto. Un abrazo.
En Orocante, una ciudad destruida por la guerra y dominada por las mafias, Chucho trata de sobrevivir en las calles del barrio ruso mientras busca desesperadamente respuestas a un trágico suceso de su infancia que lo marcó para siempre. Cuando Pavel se cruza en su camino, los secretos bien guardados salen a la luz junto con una pasión desmedida que amenaza con desintegrar el frágil equilibrio de la ciudad. El amor puede aniquilarlos, pero también es la única fuerza lo bastante poderosa para salvarlos.
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